en UX

El mito de SEO contra UX

Mejorar la UX ayuda al SEO

Corren por la red muchos mitos en relación al SEO y al diseño UX, y probablemente el más incierto es el que dice que están reñidos.

En los inicios del SEO, la propia lógica de los algoritmos incentivaba técnicas que ciertamente entraban en conflicto con una buena legibilidad, pero en especial Google, ha evolucionado su algoritmo de tal forma que favorece en el ranking a contenidos de calidad penalizando el stuffing y cualquier técnica que perjudique la experiencia del usuario.

Vamos a ver cómo, optimizando tu contenido para los usuarios, puedes potenciar el ranking en motores de búsqueda.

Findability y bounce rate

Siempre digo que la experiencia del usuario comienza en el motor de búsqueda. La encontrabilidad (findability) en UX es básica, aún más si el usuario ha iniciado la búsqueda fuera de tu página.

Cuando un usuario introduce unas palabras clave en el buscador y recibe unos resultados, espera que el enunciado de éstos y el contenido al que enlazan estén relacionados. Muchos intentos fallidos le generan frustración.

Cuando el usuario accede desde una SERP (Search Engine Result Page) a nuestro sitio web y el contenido no le satisface saldrá inmediatamente de la página. Eso tiene dos aspectos negativos:

  1. Aumenta el Bounce Rate (ratio de rebote).
  2. El usuario aprende a fijarse en los dominios que aparecen en los motores de búsqueda para discriminar aquellos que mejor contenido le ofrecen.  Por lo que bajan las visitas a sitios de mala calidad.

La consecuencia es un descenso en el ranking ya que Google tiene muy en cuenta la relación entre estos dos parámetros para determinar si nuestra página ofrece un contenido relevante o no.

La forma de evitar esto favorece a ambos, SEO y UX, y podemos resumirla en los siguientes puntos:

  1. Carga rápida del contenido
  2. Fácil escaneo de las palabras clave del texto
  3. Relevancia del contenido
  4. Diseño responsive

Tiempos de carga

Ningún usuario llegado por búsqueda orgánica esperará mucho teniendo otros resultados que explorar. Por lo que, como hemos dicho, subirá nuestro bounce rate, ya que saldrá por la misma página que entró. Y si tiene la paciencia para esperar, su experiencia será será igualmente pobre y tras varias experiencias similares, vetará nuestra web.

Por esta misma razón Google tiene muy en cuenta los tiempos de carga para ofrecer a sus usuario enlaces al mejor contenido en el menor tiempo posible.

Legibilidad

Hay muchos aspectos implicados en la legibilidad. Entre ellos podemos destacar:

  • Síntesis
  • Estructura
  • Lenguaje familiar al usuario

Si el usuario busca una respuesta rápida y se encuentra con un texto extenso, des-estructurado y/o en términos complejos o desconocidos, saldrá de ella y de nuevo nos encontraremos con un aumento del ratio de rebote y una reducción de la media del tiempo en página.

Tanto a expertos de SEO como de UX os sonarán familiares los siguientes consejos:

  1. Dividir el contenido en frases cortas y sencillas agrupadas en párrafos de unas 20 palabras o menos.
  2. Dividir el contenido (máx. 300 palabras) mediante encabezados que incluyan las palabras clave de forma que sean fácil de escanear.
  3. Incluir dichas palabras clave por el contenido resaltadas en aquellos puntos donde el enunciado sea más relevante.
  4. Empezar por la conclusión y luego desarrollarla de forma que el usuario se haga una idea inmediata de qué encontrará a continuación.
  5. Utilizar un lenguaje natural y familiar al usuario, evitando un exceso de repetición de las palabras clave pero sin caer en un lenguaje rebuscado para conseguirlo.

Siguiendo estas pautas conseguiremos el interés del usuario al inicio y durante la lectura, logrando así tiempos más largos en la página para ayudar a nuestro SEO a la par que proporcionamos una mejor experiencia de usuario.

Relevancia del contenido

Probablemente la primera pista de la relevancia de un texto es su extensión. Si es muy corto y además al inicio no descubrimos en él indicios de lo que estábamos buscando, probablemente pensemos que no lo contiene. Y quizás sea cierto.

Por otro lado, tendría que ser muy bueno el contenido para que, con un par de párrafos, Google lo valorase positivamente. Por ejemplo la entrada de un diccionario, o si el artículo incluye un vídeo.

Además, Google busca al inicio del contenido las palabras clave que usará para rankear esa página y puntuará mejor aquellas que estén incluidas en un contexto relacionado. También dará relevancia a los enlaces entrantes con esas keywords y a los enlaces contextuales que apunten desde el contenido a otras páginas relacionadas con el tema.

Es decir, se preocupa de dar al usuario un contenido relevante acorde al tema que trata.

Responsive

Todos sabemos la relevancia que tiene adaptar los contenidos a cada dispositivo para lograr los objetivos en UX. Google también y, por eso, valora mejor las páginas responsive para posicionar en búsquedas desde móviles.

Conclusión

Si mejoramos nuestros tiempos de carga y redactamos pensando en el usuario creamos empatía con ellos gracias a una buena experiencia.

Además, mediante la bajada de los tiempos de carga y el rebote, el aumento de las visitas y el del tiempo en página, potenciaremos nuestro SEO.

Con un buen contenido tendremos más posibilidades de que los usuarios compartan enlaces a nuestra página en otras webs (link building natural).

En definitiva, un contenido bueno para UX es un contenido bueno para SEO.

Espero vuestras opiniones. Saludos.

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